7 de julio de 2009

Y se marchó...


Y se marchó....
Se fue apagando para siempre ese amor que un día fue el faro más luminoso que hubo en ningún mar.
Se fueron marchitando las ilusiones, mientras su mente solo era capaz de recordar las palabras hirientes que se habían profesado en su última discusión.
Se formó un río de lágrimas por donde se fueron también los anhelos y las sonrisas, las caricias y los te quieros. Todos se fueron navegando en aquel caudal de tristezas. Todos y cada uno de ellos se marcharon, llenando un vacío de oscuridad.
Y se marchó....
Y nunca más su boca volvió a sonreir.


3 comentarios:

JuanMa dijo...

Aunque lo entiendo perfectamente, no me gusta nada leer que te sientes así.

Espero que sea un recurso literario.

Besos.

Perovsquita dijo...

JuanMa, muchas gracias por preocuparte.Sin embargo, no diré ni que sí ni que no. Dejemoslo en que sea un recurso literario, de alguien que se ha puesto en la piel de otro alguien...

Besitos

JuanMa dijo...

No te preocupes. no pretendía ser una pregunta ;-)

Un beso.